Al igual que los humanos, demasiada comida y muy poca actividad física ha provocado un aumento de cachorros regordetes. Y ese aumento significa que muchos perros están lidiando con problemas de salud relacionados con la grasa adicional que transportan, como la tensión adicional en las articulaciones. Algunas razas (comúnmente se mencionan labradores y beagles) muestran una marcada tendencia a engordar fácilmente.
¿Tu perro está gordo? Un perro de peso normal tiene costillas que no se ven, pero se pueden palpar fácilmente debajo de una fina capa de grasa protectora. Desde el costado y desde arriba, debería poder ver la cintura, un área justo detrás de la caja torácica donde el cuerpo de su perro debe acomodarse.
Si su perro está gordo, o si no está seguro de si está gordo, solicite la opinión de su veterinario sobre el tema. Su veterinario puede orientarlo para ayudar a su mascota a perder peso. En casos extremos, eso podría implicar un cambio total de dieta. En muchos perros, sin embargo, el problema se puede solucionar fácilmente eliminando algunos bocadillos adicionales, o sustituyéndolos por golosinas más ligeras, como zanahorias o pasteles de arroz, en combinación con un aumento en el ejercicio.
Hagas lo que hagas, no ignores la obesidad. Una nutrición y un estado físico adecuados ayudarán a su mascota a vivir una vida más feliz, saludable y más larga.