Solo necesita una solución de detergente muy débil para limpiar las superficies de la emulsión: 60 mililitros (ml) (4 cucharadas) de jabón en aproximadamente 5 litros (un galón) de agua caliente. Cualquier limpiador líquido multiusos está bien. Puede comprar limpiadores vendidos como líquidos o como líquidos altamente concentrados (siga las instrucciones de dilución en estos). Elegir uno con una fragancia suave puede hacer que la tarea sea más placentera.
Con esta mezcla suave, la irritación de las manos no debería ser un problema, por lo que es posible que desee usar guantes de jardinería de algodón para absorber el agua adicional en lugar de guantes de goma calientes y pesados. El jabón de azúcar también lava bien las paredes, pero es mucho más caro que el detergente que se usa para la limpieza ocasional.
Guarde el jabón de azúcar para ocasiones especiales, como cuando esté a punto de repintar y desee eliminar todo rastro de residuos de detergente.
Un trapeador de esponja funciona mejor para lavar techos. Para las manchas rebeldes, puede atar una toalla sobre el trapeador para obtener un mayor poder de frotamiento. Cuando laves las paredes, puedes acercarte con una esponja (una esponja natural vieja que está demasiado gastada para el baño funciona bien).
Ya sea que uses un trapeador o una esponja, mantenerlo bien escurrido ayudará a prevenir las rayas.
Regálese un área despejada para trabajar, evitando así tropezar mientras trabaja. Mueva bien los artículos eléctricos fuera del camino, o cualquier otra cosa que pueda verse afectada por el goteo de agua.
El primer paso en la limpieza es quitar el polvo para eliminar la suciedad ligera de la superficie. Usar lana de cordero cepillada es perfecto.