Criar cabras es parte de un estilo de vida ecológico, pero para ser sostenible, debe aprender a manejar los problemas de salud comunes de sus cabras, como el tratamiento de abscesos, sin llamar al veterinario. Los abscesos suelen aparecer como bultos en la región de la cabeza y el cuello de las cabras, pero también aparecen en otras áreas.
Los abscesos infecciosos generalmente son causados por un objeto extraño, como una astilla o una espina, que se aloja debajo de la piel de una cabra y se infecta. Las inyecciones también pueden causar abscesos. A veces ves un bulto que se agranda, o es posible que de repente notes el bulto grande.
Las bacterias, como el estafilococo y el estreptococo, pueblan el absceso mientras el cuerpo arma una defensa. Si no se trata, el absceso puede desaparecer por sí solo o, más a menudo, seguirá creciendo. La pared exterior se ablanda hasta que estalla, liberando un pus maloliente. A menudo, la cabra pierde pelo en el lugar del absceso.
Puede estimular la madurez del absceso aplicando compresas calientes o puede pincharlo con un bisturí afilado. Revíselo con frecuencia y espere a que la pared exterior se adelgace y facilite la punción. Utilice siempre guantes para evitar la contaminación; use toallas de papel para absorber el pus y quemarlas cuando haya terminado. Luego, aplique compresas tibias sobre la herida varias veces al día para ayudar en la cicatrización. También puede poner un ungüento antibiótico triple en el área.
Los abscesos infecciosos no son un gran riesgo para el resto de la manada si estallan, aunque pueden propagar bacterias. Por otro lado, la bacteria Cornybacterium pseudotuberculosis puede desarrollarse e infectar los ganglios linfáticos y causar abscesos tanto dentro como fuera del cuerpo. Esto causa una enfermedad llamada linfadenitis caseosa (CLA).
Cuando los abscesos externos causados por las bacterias estallan, el CLA puede diseminarse entre el rebaño. También se puede transmitir a través de líquidos corporales y cuando una cabra infectada tose. Las bacterias pueden vivir en el suelo, en las paredes del granero y en otros objetos durante años. Aunque actualmente no existe una cura, se puede vacunar contra la enfermedad.
Si descubre un absceso que contiene material espeso y verdoso, asuma que es CLA, aísle a su cabra y comuníquese con su veterinario para una mayor investigación. El veterinario puede aspirar el contenido del absceso y hacer que un laboratorio lo analice.
Puede evitar el CLA en su rebaño preguntando a la persona a la que le compra las cabras si las ha vacunado o lo ha tenido en su rebaño, y específicamente en el animal que está comprando o sus padres. Si descubre que tiene CLA en su rebaño, separe o retire esa cabra de su rebaño debido al riesgo para otras cabras.