El moho y los hongos pueden parecer actores menores en el escenario de amenazas ambientales peligrosas, pero algunos mohos pueden causar importantes problemas de salud. Si desea una casa verde y limpia, debe prevenir o eliminar el moho y los hongos.
La humedad es algo complicado porque puede desaparecer silenciosamente en un rincón mal ventilado o incluso penetrar dentro de una pared, creando las condiciones ideales para que crezcan el moho y los hongos. La mejor defensa contra el moho y los hongos es asegurarse de que su hogar esté bien ventilado. La acumulación de condensación en ventanas y otras superficies indica que es posible que su hogar no intercambie el aire interior con el aire exterior con la suficiente frecuencia.
Si está renovando para hacer que su hogar sea más eficiente energéticamente, evalúe la ventilación, selle las fugas de ventilación e instale puertas y ventanas más herméticas si sellar las fugas no resuelve el problema.
Para limpiar el moho y los hongos:
Prepare una solución de una parte de lejía por cuatro partes de agua.
Es cierto que la lejía es un producto duro de usar, pero es la solución más eficaz para eliminar el moho y los hongos. Las soluciones más naturales solo pueden reducir el moho; debe deshacerse de él por completo; de lo contrario, volverá.
Protéjase con guantes, ropa vieja, gafas de seguridad y una máscara para la boca y la nariz.
No conviene inhalar los vapores de la lejía ni las esporas de moho que pueda desprender al frotar con la solución de lejía.
Frote cualquier parte repugnante que pueda encontrar.
Los materiales que absorben agua, como los paneles de yeso, las alfombras y los paneles del techo, son prácticamente imposibles de eliminar el moho: es mejor quitarlos, colocarlos en bolsas de basura de plástico y desecharlos.