Según un estudio de la Universidad de Wollongong (Australia), dar a los niños de 30 a 40 minutos de ejercicio al día desarrollará una mejor cognición y capacidad de aprendizaje que otros niños.
De hecho, muchos estudios científicos han demostrado que la actividad física tiene muchos beneficios para la salud. Por lo tanto, los padres modernos necesitan una visión diferente del movimiento para ayudar a su bebé a desarrollarse física e intelectualmente.
¿Por qué debería dejar que su hijo haga más ejercicio?
Salud del corazón: al igual que otros músculos, el músculo cardíaco se vuelve más fuerte y resistente cuando hace ejercicio con regularidad. Esto ayuda a prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares , que son la principal causa de muerte.
Bueno para las arterias y las venas: el ejercicio reduce el colesterol y las grasas nocivas, aumentando la flexibilidad de las paredes de los vasos sanguíneos, lo que puede reducir indirectamente el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares .
Fortalece el pulmón: el ejercicio regular ayuda a que la función de intercambio de gases del pulmón funcione mejor. Esto aumentará la capacidad del cuerpo para absorber oxígeno y eliminar muchas toxinas.
Reduce el azúcar en sangre: estar activo estimula los músculos para que absorban más glucosa y la utilicen como energía. Esto ayuda a evitar que el azúcar se acumule en el torrente sanguíneo y reduce el riesgo de diabetes .
Control de peso: los hábitos de actividad física pueden ayudar a liberar el exceso de calorías que su hijo consume todos los días, lo que ayuda a prevenir la acumulación de grasa y a mantener un peso estable.
Huesos fuertes : los niños que son físicamente activos durante la niñez lograrán la mayor densidad ósea en comparación con los niños inactivos. A partir de ahí, el niño evitará el riesgo de osteoporosis en el futuro.
En particular, además de los beneficios anteriores, muchos estudios también demuestran que el movimiento puede estimular la producción, conectar las células nerviosas, mejorar la capacidad cerebral y, por lo tanto, aumentar el coeficiente intelectual, desarrollar la concentración, el procesamiento de la información y la creatividad. Específicamente, el movimiento aumentará la cantidad de neurotransmisores, estimulando la conexión entre las neuronas (el componente básico y más importante del cerebro). Durante el proceso motor, el corazón también está más activo, la sangre que transporta más oxígeno y nutrientes esenciales se bombea de manera constante al cerebro, lo que ayuda a que el cerebro funcione de manera efectiva.
No solo eso, el ejercicio regular también es una forma de ayudar a fortalecer el sistema inmunológico para prevenir el riesgo de enfermedades. La razón es que al hacer ejercicio, el cuerpo liberará sudor para ayudar a excretar toxinas y eliminar las bacterias dañinas que se acumulan en la piel. Esto mejora las defensas de la piel para ayudar a proteger al cuerpo de agentes ambientales dañinos, especialmente bacterias patógenas.
5 juegos de movimiento para niños sencillos pero saludables
1. Ciclismo
Andar en bicicleta por el vecindario es una gran actividad que debe animar a su hijo a realizar con regularidad. Además de mejorar la actividad física , el ciclismo también ayuda a los niños a adquirir confianza y audacia. No solo eso, en el proceso de ciclismo, los niños necesitan coordinar hábilmente entre las piernas (pedal) y las manos (girar la dirección) y los ojos deben observar cuidadosamente el espacio circundante. A partir de ahí, los niños aprenderán las experiencias y habilidades necesarias por sí mismos.
2. Juega en el parque
Esta también es una actividad divertida para toda la familia porque jugar en el parque no solo permite que los niños corran y jueguen libremente, sino que también brinda a toda la familia la oportunidad de relajarse y respirar aire fresco. Tenga en cuenta que si está jugando durante el día, además de tener algunos bocadillos listos, es necesario preparar un sombrero y protector solar. Además, conviene traer un poco de jabón antibacteriano para limpiar las manos y los pies del niño después de jugar.
3. Natación
La natación no solo promueve la salud, sino que también es una habilidad útil para la vida que puede ayudar a los niños a protegerse en situaciones peligrosas. No solo eso, muchos estudios también demuestran que la natación ayuda a producir muchas hormonas de crecimiento, lo que ayuda a los niños a alcanzar la altura máxima.
En particular, los niños que nadan con regularidad también desarrollan su lenguaje y sus habilidades motoras antes que los que no están entrenados. Además, los niños que aman nadar también tienen un mejor sistema inmunológico porque los niños que saben nadar suelen tener confianza, alegría, independencia y adaptación a todas las circunstancias.
4. Juega al bádminton
Esta es una actividad bastante simple pero llena de risas y puede fortalecer las relaciones entre los miembros de la familia. Toda la familia puede dividirse en 2 equipos y jugar juntos. De esta manera, tanto usted como su bebé tendrán tiempo para estar activos sin sentirse cansados.
5. Juega al escondite
Hide and Seek es un juego familiar en la infancia de todos, pero pocas personas esperan que este juego brinde muchos beneficios al desarrollo de su bebé. Además de mejorar la salud física, este juego también les enseña a los niños el concepto de la existencia de las cosas, anima a los niños a usar su imaginación y desarrolla habilidades de resolución de problemas como tratar de encontrar buenos lugares, los mejores para esconderse o encontrar el objetivo.
Cualquier actividad física tiene riesgos potenciales y también este juego de "escondite". Es importante que cree un área segura para los niños, prohíbales subir a cierta altura y muéstreles dónde no deben esconderse. Además, también debe convenir una señal para finalizar el juego en caso de que no pueda encontrarlo porque el niño se esconde demasiado bien o es demasiado tarde y es hora de irse a casa.
Con suerte, con el intercambio anterior, su bebé pasará un buen rato para jugar.