Los hábitos de sueño y de sueño de los bebés comenzarán a cambiar a medida que ingresan a la adolescencia. Algunas actividades diurnas y algunos buenos hábitos a la hora de acostarse son formas útiles de ayudarlo a cuidar el sueño de su hijo adolescente.
Los adolescentes a menudo tienen el hábito de acostarse tarde y no quieren levantarse temprano. Deje que aFamilyToday Health aprenda sobre el sueño de los adolescentes y apoye a los niños para que duerman bien, de acuerdo con la edad y ayude a los niños a fortalecerse.
¿Por qué el sueño es tan importante para los adolescentes?
El sueño de los adolescentes es muy importante porque:
Ayuda para la salud
El sistema inmunológico del niño está funcionando bien.
Ayuda a aumentar la energía, mejora la concentración.
Ayude a los niños a recordar las cosas por más tiempo.
La falta de sueño puede dificultar que los niños se comporten, regulen las emociones, se comuniquen con los demás, presten atención y aprendan en la escuela.
¿Cuántas horas de sueño necesita un adolescente cada noche?
Los adolescentes necesitan de 8 a 10 horas de sueño cada noche. Esto significa que los niños todavía necesitan dormir más que los adultos para aprender y jugar mejor durante el día.
Además, no es posible que un niño duerma lo suficiente. Es importante prestar atención a la calidad del sueño de su hijo. Por lo general, al entrar en la adolescencia, los niños comienzan a formar el hábito de acostarse tarde y despertarse tarde a la mañana siguiente. Esto se debe a que en esta etapa el cuerpo del niño comienza a secretar más hormona melatonina durante la noche, lo que afecta el reloj circadiano del niño. Además, el cerebro del niño también madurará durante este período. Por lo tanto, puede hacer que los niños estén más alerta.
Cómo los adolescentes apoyan el sueño
Puede ayudar con el cuidado del sueño de su adolescente observando lo que hacen durante el día. Los niños necesitan tener una dieta nutritiva, tener relaciones sociales positivas y hacer ejercicio con regularidad.
Las buenas rutinas durante el día pueden ayudar a su hijo a evitar problemas para dormir. Estos hábitos también pueden ayudar a su hijo a resolver los problemas que surjan relacionados con el sueño.
1. Buenos hábitos que debes practicar con los niños
Anime a su hijo a que se acueste y se despierte a tiempo. Mantenga esta rutina incluso los fines de semana para ayudar a que el reloj circadiano de su cuerpo se acostumbre a esto.
Anime a su hijo a levantarse de la cama después de despertarse en lugar de intentar quedarse atrás.
Tómese el tiempo para realizar actividades relajantes antes de acostarse. Estas actividades pueden ser baños calientes, beber un vaso de leche tibia, leer libros, escuchar música suave ...
Anime a su hijo a que tome una siesta de no más de 20 minutos y duerma al comienzo del mediodía. Dormir demasiado y demasiado tarde puede dificultar que un bebé se duerma por la noche.
2. Entorno para dormir del bebé
Apague la música, los teléfonos celulares, las pantallas de las computadoras y la televisión al menos una hora antes de acostarse. Las llamadas, los mensajes de texto y las redes sociales pueden interrumpir el sueño. Así que anímelos a hablar con sus amigos durante el día en lugar de por la noche.
Eche un vistazo a la habitación de su hijo. Un espacio tranquilo y con poca luz es importante para que los bebés duerman bien por la noche.
Asegúrese de que su hijo se sienta seguro por la noche. Premie el valor de su hijo si tiene miedo de algo. Evite ver programas de televisión, películas, videojuegos o libros que contengan elementos que asusten a su hijo. Algunos niños tienen miedo a la oscuridad. Entonces, cuando te vayas a la cama, deja las luces encendidas por la noche.
Si su hijo está constantemente interesado en el tiempo, anímelo a que mueva el reloj a un lugar que no pueda ver.
Si su hijo tiene problemas para dormir, déjelo que se siente y haga algunas actividades relajantes como leer ... Cuando se canse, puede volver a la cama.
3. Buena salud y nutrición
Asegúrese de que su hijo tenga una cena moderada a una hora razonable. Sentirse demasiado hambriento o demasiado lleno antes de irse a la cama puede hacer que el bebé se sienta incómodo y difícil de dormir.
Anime a su hijo a que reciba mucha luz solar, especialmente por la mañana. Esto ayuda al cuerpo a producir la hormona melatonina en el momento adecuado durante su ciclo de sueño.
Asegúrese de que su hijo tenga un desayuno saludable. Es posible que los bebés no coman nada, pero un desayuno ligero puede ayudar a poner en marcha el reloj circadiano del cuerpo.
Anime a los niños a limitar su consumo de cafeína, que a menudo se encuentra en bebidas como la coca, el té y el café, especialmente por la tarde y la noche.
Anime a su hijo a hacer ejercicio durante el día, no por la noche. La actividad excesiva durante la noche puede dificultar el sueño de los niños.
4. Ansiedad
Si hay preocupaciones que hacen que su hijo se despierte por la noche, intente hablar de ello durante el día. Usted y su hijo pueden trabajar juntos para encontrar formas de resolver los problemas que enfrentan.
Anime a su hijo a escribir sus miedos en un cuaderno, ayudándolo a refinar su pensamiento.
Señales de que su bebé tiene problemas para dormir
Un menor puede tener problemas para dormir si:
Se necesita mucho tiempo para conciliar el sueño.
Muchas veces se despertaba por la noche y no podía volver a conciliar el sueño.
Es muy difícil despertarse a tiempo por la mañana.
Tiene hábitos de sueño cotidianos inusuales.
Sonambulismo o despertarse con frecuencia para comer por la noche
Tiene pesadillas a menudo.
Si su hijo tiene problemas para dormir, también puede experimentar algunos signos durante el día, como:
Todas las mañanas es difícil despertar a los niños para ir a la escuela.
Ver siempre al niño con falta de energía o cansado
Duerme siestas demasiado largas o duerme en la escuela
Es difícil concentrarse o memorizar.
Es poco probable que los cambios en los hábitos de sueño de los adolescentes, como dormir más tarde de lo habitual, sean causados por problemas de sueño. Esto puede deberse a que el bebé tiene un problema y no a un trastorno del sueño .
Algunos problemas de sueño de los adolescentes pueden mejorarse temporalmente mediante buenas rutinas y dietas durante el día para ayudar a los bebés a dormir mejor.
Resuelve los problemas de sueño de los adolescentes
Si su bebé tiene problemas para dormir, probablemente tendrá que hacer cambios en su estilo de vida y practicar nuevos hábitos de sueño durante semanas. Además, también debe involucrar a su hijo en la resolución de problemas relacionados con su sueño. Puede hacerles algunas preguntas, como qué les dificulta dormir. Luego, deje que su hijo elija una rutina diurna que necesite cambiar para dormir mejor. Por ejemplo, los niños pueden hacer ejercicio todas las tardes.
Si nada de lo anterior funciona, debe llevar a su hijo a un médico o psicólogo. Los expertos pueden recomendarle una solución adecuada. Idealmente, debe consultar con su médico sobre el problema de sueño de su hijo y no debe tomar pastillas para dormir de venta libre por su cuenta.