La arcilla es un juguete divertido para todas las edades, especialmente en los niños pequeños. Exprimir, enrollar y dar forma con arcilla son actividades divertidas que los bebés pueden hacer. Jugar arcilla no solo los anima a desarrollar su imaginación, sino que también les brinda muchos otros beneficios.
Puede dejar que los niños de 3 años en adelante jueguen con arcilla porque a esta edad, son conscientes y no se llevan la arcilla a la boca. Aunque la arcilla es tan segura como la harina de trigo y los tintes naturales, la arcilla puede asfixiar a su hijo si se ingiere. Según los expertos en pediatría, jugar arcilla puede ayudar a los niños a desarrollar fuerza en los dedos y las manos. Esto será de gran ayuda para que su hijo aprenda a agarrar y sostener bolígrafos en el futuro. Además, jugar arcilla también ayuda a los niños a aprender mejores habilidades de coordinación ojo-mano.
Jugar arcilla con su hijo es la forma en que puede interactuar con él. Es muy importante que los padres jueguen con sus hijos, especialmente antes de que comiencen la escuela. Esto no solo ayuda al niño a desarrollar las habilidades necesarias para la vida y el aprendizaje, sino que también ayuda a construir una relación entre padres e hijos . Estos juegos también ayudan a los niños a aprender habilidades sociales y confianza para hacer frente a las dificultades futuras.
Deje que los niños jueguen con arcilla para ayudar a desarrollar habilidades cognitivas.
Durante la edad adulta, los niños desarrollan habilidades de autorregulación y manejo. Estas habilidades se basan en tres factores: memoria, control y flexibilidad. El primer factor ayuda a los niños a tener en cuenta la información. El segundo factor evita que los niños tengan impulsos, ayuda a resistir la tentación y puede detenerse en todas las acciones. El último factor ayuda a los niños a ajustar el plan según la situación.
Hay muchos juegos para ayudar a los niños pequeños a desarrollar estas habilidades, y jugar con arcilla es uno de ellos. Jugar arcilla ayuda a los niños a aprender cómo establecer metas (por ejemplo, hacer una flor con arcilla), aprender qué hacer y ajustar el plan durante la implementación (agregar pétalos adicionales para hacer la flor más hermosa).
La creatividad es una habilidad vital muy importante para ayudar a los niños a superar las dificultades y encontrar soluciones. Jugar arcilla también estimula la curiosidad del niño. Más importante aún, jugar arcilla también ayuda a los niños a desarrollar su cerebro. Las experiencias visuales y táctiles de jugar arcilla ayudarán en la formación de nuevas células nerviosas y conexiones nerviosas en el cerebro.
Desarrollar habilidades motoras
Una de las cosas interesantes de la arcilla es que este juego es muy suave, flexible y se puede cambiar de forma a voluntad. Es esta propiedad la que fortalece los músculos y tendones de la mano, ayudando a los niños a aprender a sostener tijeras y bolígrafos en el futuro.
Mientras juegan, los niños pueden rodar, frotar, aplastar, cortar, apuñalar ... arcilla. Todas estas acciones ayudan a los niños a desarrollar los músculos de muchas maneras y les ayudan a aprender las habilidades de coordinación ojo-mano.
Imaginación y creatividad
Clay es un gran juego para que los niños desarrollen su imaginación y un medio para que creen muchos juguetes en los que puedan pensar. Con unos bollos pequeños con unas velas de barro, los niños pueden pensar de inmediato en una fiesta de cumpleaños o en pequeños guijarros de barro que pueden llevarlos a una hermosa playa.
Reduce el estres
Jugar arcilla puede ayudar a reducir el estrés y ayudar a que su hijo se sienta relajado. Si el niño tiene dificultad para expresar emociones, al jugar arcilla, el niño tiene la oportunidad de hablar con sus padres, por lo que puede ayudar a mejorar esta situación.
Ayude a su hijo a aprender matemáticas y letras
Cuando juegue arcilla con su hijo, puede usar la arcilla para formar letras, números, nombres o dibujos divertidos para que aprendan a contar y reconocer letras.
Jugar arcilla es una actividad sedentaria. Por tanto, este es un juego apto para niños en días de lluvia para ayudarles a relajarse y desarrollar otras habilidades imprescindibles.