Si cree que el proceso de crianza no se rinde simplemente motivando y motivando a su hijo todo el tiempo, no es suficiente porque necesita más que eso.
La perseverancia siempre marca una brecha y una gran diferencia entre el éxito o el fracaso. ¿Se ha preguntado alguna vez si su bebé es lo suficientemente fuerte como para seguir superando desafíos o si se verá obstaculizado por sí mismo en momentos de dificultad?
Los niños que aprenden a aceptar los errores y superar sus miedos se equiparán con una de las habilidades más importantes para la vida. Si desea que su hijo tenga éxito en este mundo competitivo, debe aprender a mantener la fe. Los estudios han demostrado que puede enseñar a sus hijos a no darse por vencidos aplicando estrategias simples y fáciles de seguir. El siguiente artículo, aFamilyToday Health , revelará cómo hacer esto.
1. Encuentra la actividad adecuada
Bríndeles todas las oportunidades para encontrar sus propios intereses , pasiones o talentos naturales. Si a su hijo le gusta dibujar, pregúntele si quiere ir a clases de arte los fines de semana. Si a su hijo le gustan los deportes, no dude en enviar a su bebé al campo de entrenamiento, trate de estimular la emoción de su hijo tanto como sea posible antes de comenzar la actividad. Sin embargo, estas preferencias deben ser apropiadas para la edad del niño.
2. Empiece con las expectativas correctas
Cuando enseñe a sus hijos a no renunciar a ninguna de sus metas, considere primero los siguientes factores:
Factores de edad: Pregúntese si esto es algo en lo que su hijo está interesado o está comenzando a mostrar genialidad en esta área o simplemente quiere que participe en tantas actividades como sea posible. ¿Es ese objetivo apropiado para el niño?
Factor de tiempo: ¿Tendrá su hijo tiempo suficiente para participar en actividades extracurriculares? No permita que los niños se sobrecarguen y oblíguelos a siempre estudiar bien y ser buenos en los deportes porque a menudo se perderán una de las dos tareas anteriores si no tienen suficiente tiempo para divertirse con sus amigos. Un estudio de la Universidad de Maryland encontró que durante los últimos 20 años, la cantidad de tiempo que los niños de 9 a 12 años practican deportes ha aumentado en un 35%.
El factor de desafío: ¿Está su hijo listo para esto y lo estoy presionando más? Las mejores expectativas son ser realistas pero al mismo tiempo ayudar a su bebé a dar un paso más.
Factor del maestro: ¿Tiene el entrenador o el maestro las habilidades para ayudar al niño a aprender bien? La investigación de Benjamin Bloom sobre 120 personas increíblemente talentosas y exitosas en campos como la ciencia, la natación, el arte y la música encontró que el primer maestro fue crucial.
Vale la pena el precio: si a su bebé le gustan las actividades como el piano, el tenis, considere si esto afecta sus finanzas, su energía y a toda la familia.
3. Conviértete en un modelo a seguir
Muéstrele a su hijo que no renunciará al trabajo incluso cuando las cosas se pongan difíciles. Antes de comenzar una tarea, asegúrese de que su hijo escuche a sus padres decir: "perseveraré hasta lograrlo". Ser un modelo a seguir para su hijo siempre ha sido el método de enseñanza número uno y esto también lo respalda a usted mismo.
4. Cultiva el pensamiento correcto
Las investigaciones muestran que los niños persistentes y sobresalientes se dan cuenta de que el éxito proviene del trabajo duro, no solo de la suerte, el dinero o la genética. De hecho, si un niño cree que un buen resultado se debe al esfuerzo, será menos probable que se dé por vencido y trabajará más duro que simplemente sentarse pasivamente, pero aún así querrá obtener buenos resultados.
Por eso, para que el proceso de crianza no se dé por vencido con éxito, desde muy joven conviene resaltar historias sobre la diligencia, el entusiasmo y evitar decir cosas como: "Hacerlo es por suerte", "Todo es de mala suerte".
5. ¿Qué hacer cuando quiere darse por vencido?
No te rindas demasiado rápido
Si muchas veces permites que tu hijo se rinda en momentos de dificultad, ten cuidado, porque este hábito hará que los niños se acostumbren a la falta de esfuerzo y se desanimen antes de no saber cuánto pueden hacer. Anime a su hijo: "Intenta jugar al bádminton un par de veces más, si aún no puedes, te llevaré a practicar la natación" o: "Prometí que si compraba el piano, practicaría hasta el final de la temporada". Pero verano, como el piano es tan caro, no creo que debas dejarlo sin terminar ”.
Escucha a tu bebe
Si el comportamiento de darse por vencido simplemente aparece o muestra signos de escalada, pregúntele a su hijo qué está sucediendo realmente y por qué el niño tiene tales pensamientos: "Los maestros son demasiado confusos o ¿tienen amigos cuando eran niños? ¿Divertidos?".
Encuentra una solución
El proceso de enseñar a los niños a no darse por vencidos incluye factores objetivos a evaluar como la equidad, la relación entre las personas que los rodean. A continuación, se muestran algunos problemas comunes que ocurren con frecuencia y soluciones sugeridas:
Si la tarea es demasiado difícil con mucha presión para que el bebé rinda lo mejor posible, intente sugerirle que pase a otra cosa.
No tener tiempo para relajarse debido a que tiene que hacer ejercicios avanzados es una de las razones más comunes por las que los niños pequeños dejan de estudiar bien. Para solucionar este problema, los padres deben relajar el tiempo de estudio de su hijo y alternar en él un tiempo de relajación.
El entorno no propicio también puede desanimar fácilmente a su bebé, intente mudarse a otro lugar.
No lograr un éxito rápido afectará en parte la voluntad de los niños. En esos momentos, ayude a su hijo, por ejemplo, contrate a un tutor si siente que no comprende todo. El trabajo duro, el trabajo duro es muy bueno, pero también debes saber si tu dirección es la correcta o no para obtener los resultados deseados.
6. ¿Cómo decido si me rindo?
Deberá considerar qué tareas son más importantes y eliminar las actividades inapropiadas. Aquí hay cinco factores que le ayudarán a decidir:
Presión: ¿El estrés de los superdotados o las clases de tutoría hará que su hijo cambie de comportamiento?
Gusto: ¿Puedes mantener la misma alegría al principio? ¿Se reconocerán debidamente mis esfuerzos?
Excesivo: ¿Son los ejercicios demasiado difíciles para que los haga su hijo?
Mal entrenador o mentor: Esta persona no es adecuada para tu hijo, le gusta gritar y es demasiado competitiva, lo presiona para ganar a toda costa, es injusto, ignorante o da malos consejos ... en general más dañino que útil.
Demasiado difícil: los niños siempre deben intentarlo, pero aún así no obtienen resultados.
Esperamos que el artículo anterior le ayude a comprender los métodos para enseñar a sus hijos a no darse por vencidos y a tener mucha paciencia con su bebé. ¡Le deseo éxito!