Este helado sin lácteos sabe especialmente bien hecho con melocotones frescos cultivados localmente cuando están en temporada. Experimente con esta receta utilizando otras frutas frescas de temporada, incluidas cantidades iguales de melón o melón dulce o mezclas de bayas.
Tiempo de preparación: 5 minutos.
Tiempo de congelación: 35 minutos.
Rendimiento: 10 porciones
Equipo especial: Heladera
6 tazas de leche de vainilla y almendras (o su elección de leche no láctea)
3 tazas de duraznos frescos o congelados pelados y en rodajas
1 taza de azucar
2 cucharadas de almidón de arrurruz
2 cucharaditas de extracto puro de vainilla
1/4 cucharadita de sal
Procese todos los ingredientes, excepto los duraznos, en una licuadora hasta que quede suave y cremoso. A continuación, agregue los duraznos y pulse una o dos veces, creando pequeños trozos de durazno.
Congele la mezcla en una máquina para hacer helados manual o eléctrica durante aproximadamente 35 minutos (o según las instrucciones del fabricante de su máquina) y sirva.
Para un sabor a durazno más fuerte, reemplace 1 taza de leche de almendras con 1 taza de néctar de durazno.
Por porción: Calorías 159 (de Grasas 16); Grasa 2 g (saturada 0 g); Colesterol 0 mg; 151 mg de sodio; Carbohidrato 35 g (fibra dietética 1 g); Proteína 1g.