La dieta mediterránea no es una "dieta" en la definición comúnmente aceptada de la palabra; es realmente un estilo de vida. Y nada personifica eso más que el hecho de que el vino tiene su lugar en la pirámide alimenticia mediterránea estándar. Es cierto que el vino puede tener beneficios para la salud, pero también caracteriza el estilo de vida mediterráneo como uno que valora la buena comida, la buena bebida y las comidas relajantes. Utilice esta guía para seleccionar los vinos para acompañar sus comidas mediterráneas.
Elegir vinos tintos
| Vino |
Gusto |
Emparejarlo con |
| Cabernet Sauvignon |
Seco, de cuerpo medio a completo, con sabores de ciruela, mora,
vainilla y tabaco. |
Carnes rojas magras, pastas o un trozo de chocolate amargo |
| Chianti |
Seco, de cuerpo medio, con sabores de cereza y rosas. |
Todos los alimentos italianos, pasta a base de tomate, queso parmesano y
pollo o carne magra |
| Merlot |
Seco, de cuerpo medio, con sabores de ciruela, cereza negra, especias
y chocolate. |
Aves, carnes rojas magras, pastas y ensaladas. |
| Pinot Noir |
Seco, de cuerpo ligero a medio, con sabores de cereza,
mora, fresa, canela y clavo. |
Aves, pescado y verduras; también ofrece un buen equilibrio para
platos más pesados |
| Zinfandel Blanco (Rosado) |
Dulce y ligero, con sabores de bayas, cítricos y
vainilla. |
Platos suaves y picantes, fruta, pescado y carnes magras. |