La enfermedad celíaca es una afección que daña el revestimiento del intestino delgado cuando se ingiere gluten. La enfermedad celíaca puede poner en peligro la vida de quienes la padecen.
Así es como funciona: cuando come gluten (ya sea en trigo, cebada o centeno), el sistema inmunológico ataca el revestimiento interno de su intestino delgado para evitar que el gluten sea absorbido por el resto de su cuerpo y cause problemas en otras partes.
Bastante bien, ¿eh? Sí, pero cuando su sistema inmunológico ataca el revestimiento del intestino delgado, el revestimiento tampoco puede absorber nada más, por lo que sigue la desnutrición.
Los síntomas de la enfermedad celíaca pueden ser difíciles de detectar, pero si experimenta algunos de los siguientes síntomas, programe una cita con su médico:
Si padece celiaquía, el tratamiento es sencillo: deje de comer gluten. Si continúa con una dieta rica en gluten, su cuerpo no podrá absorber importantes vitaminas y minerales. Continuar comiendo gluten puede provocar retraso en el crecimiento, anemia, enfermedad de la tiroides, osteoporosis y cáncer.
Las personas diagnosticadas con enfermedad celíaca están en mejor situación que aquellas personas que sufren silenciosamente sin síntomas. Los síntomas celíacos actúan como señales de advertencia de que algo no está bien. Aquellos que no presentan síntomas no tienen forma de reconocer que necesitan hacer cambios y pueden, sin saberlo, continuar comiendo los alimentos que los dañan.